viernes, 2 de diciembre de 2011

Nuevo Mazda CX-5

Diversión al volante que va más allá de lo convencional: el CX-5 representa el comienzo de una nueva era para Mazda. Es el primero de una nueva generación de vehículos, un SUV deportivo compacto con un equilibrio perfecto entre diversión, seguridad y sostenibilidad, todo ello en una propuesta muy atractiva.

El CX-5 simboliza la evolución más reciente de la preocupación de Mazda por el Jinba Ittai, la sensación de unidad entre el conductor y su vehículo. Es el primer vehículo de Mazda que incorpora todas las nuevas tecnologías SKYACTIV –desarrolladas para crear vehículos ligeros más eficientes, divertidos y respetuosos con el medio ambiente– y abre el camino para toda una nueva generación de vehículos. 
Las exclusivas cadenas cinemáticas del CX-5 tienen todas las cualidades para que cualquier propietario se sienta orgulloso. Y, por supuesto, divertido de conducir, con más par, mejor respuesta y menor consumo de combustible. Este vehículo, la última edición del Zoom-Zoom sostenible, hace con precisión lo que el conductor le pide y reacciona exactamente como cabe esperar.


Exterior: forma y funcionalidad en armonía
Los ingenieros querían conseguir un diseño deportivo e impresionante con el mejor equilibrio posible entre forma y función, por supuesto sin olvidar las prestaciones. De ahí que combinaran todo lo que se espera de un SUV deportivo –una apariencia activa y potente– con el diseño dinámico y emocional característico de Mazda. 

El atractivo del CX-5 empieza con el sólido aspecto de su frontal y los robustos pasos de rueda. Parece inclinado hacia adelante, como un velocista en la marca de salida justo antes de empezar la carrera. El habitáculo fluye hacia atrás simulando a un depredador a punto de lanzarse sobre su presa. El resultado final es una forma atlética y elegante que distingue instantáneamente a este nuevo Mazda de cualquier otro SUV. 
Los diseñadores del CX-5 también han conseguido una aerodinámica excepcional, con un coeficiente de tan solo 0,33, rompiendo con ello los límites convencionales de los SUV compactos.  Estos son tan solo algunos ejemplos de la armoniosa combinación de forma y funcionalidad en el nuevo Mazda CX-5. 

Interior: El conductor como centro de atención
Por dentro, Mazda ha organizado un habitáculo orientado al conductor, con una estética sólida y madura que refleja la fuerza y el carácter robusto exterior del CX-5. Y, como era de esperar en un Mazda, la vista y el tacto del interior subrayan las características deportivas del coche. 
El objetivo era crear un espacio sugerente, que invite a entrar y a conducir. Y el habitáculo da realmente la bienvenida, con toda la fuerza del lenguaje de diseño KODO: ofrece un extraordinario nivel de calidad constructiva, además de una ergonomía excepcional y una excelente visión de la carretera. 
Los asientos también son nuevos. De una sólida sencillez, tienen aspecto y tacto deportivo, proporcionan un agarre lateral y vertical excepcional, junto a un apoyo lumbar y una sujeción de los muslos mejor que nunca, pero sin sacrificar en absoluto el confort del conductor y de los pasajeros, incluso en desplazamientos largos. Gracias al uso de nuevos materiales y a una nueva estructura, también son más ligeros. 
Desde el volante, que transmite una sensación de ligereza y manejabilidad, hasta los sistemas de control (incluidos los mandos montados en el volante, los botones del salpicadero y el HMI commander para el sistema de información y entretenimiento), cada componente ha sido diseñado para transmitir una sensación uniforme en todo el habitáculo.
Al mismo tiempo, el cuadro de instrumentos es digno de un SUV robusto, si bien es cierto que hereda su forma del legendario roadster MX-5 de Mazda. El diseño longitudinal del espacio del conductor y en especial el cuadro de relojes recuerda a una cabina y transmite una sensación de movimiento, ayudando a que el conductor se anticipe a lo que ocurre en la carretera. 

Un maletero para la vida real 
El maletero del CX-5 es otro ejemplo de cómo transportar todo tipo de cargas sin afectar al confort de los pasajeros. Una vez más, el secreto está en adaptarse a las necesidades de manera inteligente con un espacio muy eficiente, en el que se ha prestado atención a todo lo esencial. 

Se ha elegido una forma cúbica sin irregularidades ni espacios muertos, junto con un portón trasero diseñado para facilitar las operaciones de carga y descarga. Su capacidad del maletero es de las mejores del segmento, con 503 l si se incluye el compartimento inferior y permite albergar cuatro bolsas de golf o cuatro maletas. Pero aún hay más: si se pliegan los asientos traseros 4.2:4, el volumen del maletero aumenta hasta los 1620 l contando con el compartimento inferior. 


Potencia diésel limpia
Los motores SKYACTIV racionalizan la combustión interna al máximo. Existen dos versiones del SKYACTIV-D de 2,2 litros: una de acceso que desarrolla 110 kW/150 CV a 4500 rpm y 380 Nm de par en el intervalo de 1800-2600 rpm, y una versión de alta potencia (solo 4x4) que desarrolla 129 kW/175 CV a 4500 rpm y un poderoso par de 420 Nm a 2000 rpm. Unido a la transmisión manual de 6 velocidades SKYACTIV-MT, este último acelera el CX-5 de 0 a 100 km/h en tan solo 8,8 segundos, alcanzando una velocidad máxima de 207 km/h. 
No obstante, a pesar de su increíble rango de par, los motores SKYACTIV-D son unos diésel excepcionalmente limpios y ahorradores. De hecho, ambos cumplen los criterios de emisiones Euro 6 (casi tres años antes de que entren en vigor) sin necesidad de costosos sistemas de postratamiento de los gases de escape. Su secreto radica en una relación de compresión ultra baja, un diseño liviano y un turbocompresor de dos etapas, entre otros muchos conceptos inteligentes aplicados a estos motores (ver cuadro). 
El resultado final es un frugal CX-5 que ofrece un consumo medio de 4,5 l/100km (en ciclo combinado con el motor diésel de 150 CV, tracción delantera y cambio manual). Esto se traduce en unas emisiones de CO2 de tan solo 119 g/km: una de las cifras más bajas entre los SUV compactos europeos.

Gasolina con compresión ultra alta 
Los ingenieros del motor gasolina SKYACTIV-G también buscaron un diseño ligero que ofreciese más por menos. Y al igual que en el diésel, la relación de compresión es una de las características esenciales del motor de gasolina SKYACTIV-G de 2,0 litros que monta el CX-5. Sin embargo, en este caso se trata de una relación extraordinariamente elevada de 14:1 que emplea un nuevo sistema de escape tipo 4-2-1 y pistones especiales, entre otras novedades, para superar las dificultades asociadas a los índices de compresión altos (como por ejemplo la detonación). En consecuencia, el SKYACTIV-G es un 10% más ligero y presenta una fricción interna considerablemente inferior a la de su antecesor, el MZR 2.0 litros. Además ofrece un mayor par, un menor consumo y un índice de emisiones más bajo.
El CX-5 de gasolina y tracción delantera (solo manual*) desarrolla 121 kW/165 CV a 6000 rpm y 210 Nm de par a 4000 rpm, o 118 kW/160 CV y 208 Nm en la versión 4x4 al mismo régimen de motor. Esto permite al CX-5 acelerar de 0 a 100 km/h en 9,2 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 200 km/h. Su consumo de 6,0 l/100 km en ciclo combinado se corresponde con unas emisiones de CO2 de 139 g/km (también entre las mejores del segmento). 

A la hora de transmitir toda esta potencia a las ruedas, Mazda ha elegido dos nuevas y vanguardistas cajas de seis velocidades que mejoran el ya de por sí carácter dinámico del CX-5: la SKYACTIV-MT manual, de la que ya hemos hablado, y la SKYACTIV-Drive automática. Esta última incorpora amplios rangos de bloqueo del convertidor y transmite una sensación directa de conducción, similar a una manual, y combina lo mejor de los distintos tipos de cambios automatizados en una única caja. Su aceleración y cambio, suaves y lineales, se encuentran disponibles para todos los modelos 4x4 y para el diésel de 150 CV y tracción delantera*. Por su parte, la SKYACTIV-MT incorpora un selector ágil de recorridos cortos y traslada la sensación deportiva y directa del roadster MX-5 al nuevo modelo de Mazda. En cualquier caso, ambas transmisiones mejoran la eficacia y sensación del conjunto motriz en su totalidad, con un menor consumo y mayores prestaciones gracias a sus eficientes y ligeros diseños. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario


Gimnasio Aylu. Judo, Mejora Fisica, Aerobic, Defensa Personal